Este monumento que conmemora la salida del rey Jaume I desde las playas de Salou hacia la conquista de Mallorca, el año 1229, es obra del arquitecto Salvador Ripoll y del escultor Lluís Maria Saumells, quien realizó la figura del rey en piedra y la cabeza del caballo también en piedra con revestimiento de pan de oro.
Fue inaugurada el día 28 de noviembre de 1965, en un solemne acto presidido por el almirante Nieto Antúnez.
Fue el colofón a las celebraciones del "Día de la Provincia", que aquel año la Diputación de Tarragona, celebró en Salou.
Este monumento se ha convertido en una de las imágenes más representativas e identificativas del Salou actual.